Los liberales están en muy buena racha. Hace menos de un mes que salieron vencedores de las elecciones generales a la AGP con 33 escaños, consolidándose como primer partido de la Asamblea. Tras la disolución de la Asamblea a raíz de la histórica modificación constitucional que ha reconocido la propiedad privada, el partido del Presidente Macron ha revalidado su mayoría y ha salido reforzado.
El Partido Socioliberal ha aumentado su presencia en el hemiciclo hasta los 38 escaños. Hay que destacar las mayorías absolutas que ha conseguido en el Puerto de Indias, la mayoría de los territorios franceses e ingleses, Las Vegas, Sodoma y Sacramento. También ha tenido mayorías muy amplias en San Juan y Europa.
Conservadores y nacionales resisten la ola liberal perdiendo un escaño cada uno. Los socialdemócratas se mantienen y los comunistas pierden un escaño que ganan los anarquistas, quedando estos dos empatados a tres.
La gran perdedora de la noche ha sido la Sociedad Espartana, que se ha dejado por el camino 3 de los 24 escaños que tenía, quedándose en 21. Es una bajada espectacular si se tiene en cuenta que es una caída continuada. En un año ha pasado de ser el indiscutible partido principal ha ceder puestos a derecha e izquierda. Conservadores y sobre todo nacionales han captado gran parte del voto espartano.
En estas últimas elecciones, además, la derecha no ha sabido contener (en gran medida a causa de la pérdida espartana) la sangría de votos hacia el liberalismo. La personalidad arrolladora del Presidente Macron y el pragmatismo en el ámbito social han llevado a muchos ciudadanos a decantarse por esta opción hasta convertirla en mayoritaria, haciendo perder a la parte conservadora del hemiciclo su mayoría absoluta.
Aún así, los tres conservadores juntos siguen siendo mayoría y suman 49 diputados. Les bastaría que se les uniese cualquier otro partido para sacar adelante propuestas. Pero los liberales por sí solos podrían aprobar cualquier propuesta propia sólo con el apoyo de un partido de derecha o con el tripartido de izquierdas (socialistas, comunistas y anarquistas).
La legislatura se prevé no obstante estable y los especialistas no creen que haya grandes sobresaltos. Todos los expertos opinan que liberales y "nacional-espartanos" harán que la política de la República siga en el curso que lleva en los últimos meses. Aunque es evidente que, esta vez y aún más, con un punto más liberal.