El Presidente de la República, Chris Kyle, ha estado varias semanas valorando la posibilidad de presentar su dimisión y convocar eleccinoes presidenciales, las cuales haría coincidir con las generales de mañana martes.Los motivos serían la baja popularidad que el Presidente ha mostrado durante el verano. A lo largo del periodo estival, la ciudadanía vió con acierto las pautas económicas del Presidente, sobre todo las relativas al pago de la deuda. Pero por otro lado también han visto cómo baja el fondo de ahorro. A todo ello se une un posicionamiento que algunos tachan como demasiado tibio y otros como demasiado duro respecto a la cuestión matrimonial. Así, desde algunos sectores se proponían para la presidencia otros perfiles como los expresidentes Ford, Macron o Abascal o nuevas figuras como Jennifer López o Ana Oramas.
Finalmente, Kyle zanjó la polémica anoche en una rueda de prensa a la nación donde informó que no dimitiría y anunció que incorpora a su equipo de gobierno a Santiago Abascal como Vicepresidente y otros ministros de peso como Paulina de la Mora en relaciones exteriores y Gabriel J. Martín como asesor. También anunción que ha reforzado los encuentros como el consejo de expresidentes.
En cuanto a las elecciones generales que se celebrarán en pocas horas, el Presidente no ha querido pronunciarse.
Los sondeos electorales apenas han variado desde que se celebraron las últimas elecciones en marzo, por lo que el hemiciclo quedaría prácticamente igual. Se prevé que sólo unos escaños bailarán, aunque éso podría ser suficiente para que todo cambiase.
Ahora mismo los espartanos son el grupo mayoritario y les ha ido muy bien pactando con los nacionales y los liberales según conveniencia, ganando el 80% de las votaciones que proponían y tumbando muchas de las que estaban en contra. Perder tan sólo dos escaños podría dar al traste con esta estrategia. Y no es tan difícil que suceda si los sondeos aciertan en el auge de los liberales, a los cuales los más positivos dan cerca de la mayoría absoluta (aunque esto lo descartan casi todos los sociólogos y politólogos).
Donde sí vienen a coincidirse es que:
Espartanos mantendrán sus escaños. Podrían perder 2 a favor de los liberales pero los recuperarían robándoselos a los nacionales.
No está claro qué pasará con el ala derecha. Algunos dicen que los nacioanles acabarán succionando a los conservadores pero sin embargo hay quien apuesta por una remontada de éstos e inlcuso un sorpasso.
Los liberales serán los claros vencedores de la jornada si se cumplen los pronósticos.
El ala izquierda perderá varios escaños. Como mucho conseguirá resistir manteniendo los que tiene.
Las claves se verán en varios puntos. Por un lado el comportamiento del voto liberal en las zonas anglófonas está casi claro. Por tanto lo que suba este voto en otros puntos clave como Las Vegas, Sodoma o Francia será decisivo.
Los nacionales están peleando su voto en zonas conservadoras pero también, y sobre todo, en las viejos bastiones comunistas, los cuales diezmaron ya bastante en las anteriores elecciones. Los sondeos indican que es muy posible un sorpasso de los azules en barrios comunistas de Europa e incluso la misma capital. Las costas francesas también son un codiciado tesoro, así como Sicilia. Pero es el voto espartano el que los nacionales más ansían y que podría dar un vuelco a las encuestas. Si éstos se hiciesen con áreas espartanas podrían incluso rozar la mayoría absoluta.
Los conservadores tienene sus esperanzas en Sicilia y Hatikva así como el Tajo Italiano, pero lo tendrán difícil por el empuje que tienen ahí liberales, espartanos y nacionales.
Los socialistas ya se saben en arrastre y luchan con todas sus fuerzas por mantener al menos grandes ciudades andaluzas como San Juan o San Francisco así como Extremadura. El arrastre que tenga el voto de Sodoma en San Francisco, Sacramento e incluso El Gitión será decisivo.
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